Es un hotel relativamente nuevo, con una ampliación en proceso, por lo que se ven varillas y partes en obra.
Los cuartos son cómodos, de tamaño normal, con TV, aire acondicionado, y baño con agua caliente y presión media.
El principal problema sería la cantidad de insectos que se acumulan en los pasillos y afuera de las puertas y ventanas de las habitaciones, mismos que a veces logran entrar. Además, pudiesen mejorar la limpieza de los colchones, no solo el cambio de sábanas, pues hallamos mosquitos muertos y algunas mijagas de pan o galletas.
El dueño y el chico de la recepción muy atentos y eficientes para resolver.